Matemáticas: las actividades en el huerto escolar permiten recoger abundantes datos numéricos que podrán ser objeto de trabajo en clase.
Medidas de huerto. Cálculos de perímetro y superficie cultivada. Superficies destinadas a cada cultivo. Realización de planos y de croquis, situando los cultivos…
Distancia temporal entre fechas de siembra y de nacimiento. Control del crecimiento de las plantas.
Recogida de datos meteorológicos y trabajos con los mismos.
Peso de la recolección.
Precios de los productos de nuestro huerto en el mercado.
Cantidades de agua que destinamos al riego.
Lenguaje: de todo lo que vamos haciendo, hay mucho que escribir. El resultado de ello nos servirá de punto de partida para futuras experiencias. Además, el huerto escolar nos proporciona suficientes argumentos para trabajar el lenguaje creativo.
Consultas de diccionarios, enciclopedias, libros y guías especializadas para precisar significados, buscar información, etc.
Escritura de cartas a colectivos que han llevado a cabo experiencias similares para intercambiar información, organismos locales o de la administración para pedir ayudas, materiales, información, etc.
Mantenimiento del Diario del Huerto, en el que se irán reflejando los trabajos que se hacen, los cambios, las observaciones, las sorpresas, etc.
Actualización de las fichas de seguimiento, de información, de creatividad que se vayan diseñando.
Vocabulario de herramientas, plantas, faenas agrícolas, etc.
Colaboraciones escritas para la revista de clase, la del colegio o para otras publicaciones más generales.
Creación de textos, poesías, etc. que tengan al huerto y lo que contiene como protagonistas.
Adivinanzas, juegos con palabras, pareados, sopas de letras,…
Utilización de artículos y noticas de prensa que se refieren directa o indirectamente a algún aspecto de la actividad.
Lecturas de poemas, fragmentos, textos, libros y cuentos que hablan o se sitúan en estos entornos agrícolas.
Recogida de información oral, de refranes y dichos que hacen referencia a actividades agrícolas y que se guardan en la memoria de abuelos y padres.